Una semilla en nuestro interior

Desde que tengo uso de razón, me he hecho preguntas sobre mi existencia, la muerte y Dios. Desde muy pequeña con no más de cuatro años ya creía en Dios, aunque no entendía muchas cosas. Nadie era capaz de darme respuestas que me satisficieran. (Considero muy probable que vine buscando respuestas.) Y ahora que miro hacia atrás en mi vida, confirmo una expresión que a menudo he tenido en mis escritos y comentarios: " la vida es un camino". Ahora sé que realmente lo es, un camino que no ha parado y no parará hasta el final de mis días terrestres.

Los años en la secta me han limitado mucho, ya que allí dentro no te permiten crecer como individuo. La espiritualidad es totalmente falsa, de ahí que uno no puede conocerse a sí mismo ni al Dios verdadero. Eso produce un estancamiento, pero tarde o temprano el que realmente busca la verdad, se abre camino. Un día algo nace en nuestro interior que empieza a crecer y ya no para. Es como una semillita, que al final hace que despiertes de esa realidad irreal que te vendieron. Hay comentaristas que me llaman amargada, furiosa, ... en fin, muchas cosas. La realidad es que eso no es verdad, soy una persona feliz de estar donde está. Estoy orgullosa de haber llegado a este punto del camino, de haber abierto tanto la mente para escapar de muchas mentiras que nos han inculcado desde que nacimos.

Todos somos muy parecidos en realidad, salimos del mismo lugar por eso no puede ser de otra manera. En un poema lo expreso :

Como lluvia de estrellas salimos

para emprender nuestro viaje.

Millones de gotitas doradas

iluminando la oscuridad.

 

Todos salimos del mismo lugar , por lo tanto éramos una vez iguales. En realidad todos tenemos las mismas necesidades solo que cada cual estamos en un lugar diferente del camino. Todos recorreremos el mismo camino, pero no de la misma manera. Al final todos llegaremos al mismo lugar, que es de donde salimos. Algunos diréis que no tengo pruebas de lo que digo... no, no las tengo, porque no hay pruebas en esta existencia material del mundo espiritual. Yo te puedo decir que Dios existe ,¿pero como te lo demuestro?- O te puedo decir que existe un mundo no material que no vemos, ¿Cómo te lo demuestro? - Las religiones dicen en esto que hay que tener fe. Yo sin embargo no creo que se trate de fe.

 

¿Cómo vas a creer algo que no sientes y no has experimentado? - ¿Solo porque otros lo digan? - NO. Por eso estoy convencida que hay algo dentro de nosotros que nos impulsa a emprender una búsqueda de nuestra existencia y de un Creador. La semilla está plantada en nosotros, pero no germina al mismo tiempo en todos. Los sucesos que vivimos durante nuestra vida influyen en esta semilla. (Digo semilla, pero también se podría llamar luz o bajo otra definición.) Pueden acelerar o estancar el crecimiento o los pasos que damos. Este es un camino solitario , muy personal, porque cada uno de nosotros llevamos un ritmo. Por eso la religión no está bien enfocada. Pareciera que nos ayuda a encontrar a Dios y ser espirituales, pero falla al no darnos libertad de pensar y decisión. Esto es un gran error, porque impone cargas que solo nos dificultan nuestro camino. Otras no nos dejan crecer interiormente , no permiten que descubramos la verdadera espiritualidad.

 

Salimos de ese lugar que debió ser maravilloso. Una vez formamos parte de la misma esencia, pero nos dividimos.

 

La misma esencia compartíamos

con la misma luz brillábamos.

Curiosidad y ganas de experimentar

era nuestro equipaje.

 

Pero no se paró ahí la cosa, seguimos dividiéndonos, más y más. Por razas , territorios, idiomas , religiones, clase social etc. Y nos encontramos aquí en esta Realidad que se divide y divide... y no podemos imaginar otra cosa que no sea así. Al dividirnos ya dejamos de ser lo que éramos en un principio, por eso no podemos identificar a los demás ni a nosotros mismos. Andamos perdidos y desmemoriados, muy posiblemente por el tiempo que llevamos fuera de casa. No lo se, porque no tengo todas las respuestas. Pero es curioso como todos buscamos a personas afines a nosotros, porque muy pocos soportan la soledad. Ratos de soledad si, pero no soportamos la absoluta soledad. ¿Será porque una vez todos estábamos unidos? - Pues quizás el fin sea ese, volver a estar unidos.

No escondas tu luz

ilumina con tu esencia,

otros lo harán al verte brillar.

Y recuerda, todos procedemos

del mismo lugar.

 

(Estas son mis conclusiones, no las aceptes, solo considéralas. Gracias.)