LA MASCARA

Hoy salió de casa y cuando iba caminando hacia la reunión, se dio cuenta que se le había olvidado ponerse la mascara. Se tocó la cara... "¡Oh Dios mi cara , desnuda! Así no me pueden ver los hermanos. Verán mis ojos llorosos , mi cara pálida y la ausente sonrisa. Pero llego tarde , no puedo volver por mi mascara. ¿Qué dirán cuando me vean así?" - Susi, iba durante todo el camino pensando en que reacción tendrían los hermanos de la congregación al verla así, sin la mascara.

Hasta ahora nunca le había sucedido, porque siempre llevaba su mascara con esa preciosa sonrisa en ella. Los hermanos le decían : "que feliz se te ve, Jehová te está bendiciendo." Pero cuando Susi volvía a su hogar, se quitaba la mascara, y las lagrimas brotaban . Era una tristeza muy profunda lo que sentía, un vacío que nada lo llenaba. Una soledad extrema, que no comprendía , porque acababa de estar con toda una congregación de personas amables que le sonreían.

Cerca ya estaba de la puerta del Salón cuando le entró una inseguridad total. ¿Qué hacer? Entró deseando ser invisible... y de momento parece que el deseo se cumplió. Nadie la abordó. Susi entró y tímidamente escogió un sitio en un rincón. Allí estaba ella , avergonzada por no llevar esa sonrisa y esos ojos limpios de lagrimas y radiantes. Para su sorpresa nadie la abordaba, parecía ser realmente invisible. Poco a poco empezó a molestarle esa invisibilidad... ¡quería gritar. hey, estoy aquí dime algo, habla conmigo. Me siento sola, avergonzada!... todos hablaban entre si, y parecía como si ella no existiese , que no estuviera allí en ese rincón.

Llegó el tiempo para volver a casa, y parecía que alguien venia a su encuentro... ella abrió los ojos con ilusión... pero , ah no... iba hacia la hermana precursora detrás de ella. Las lagrimas le brotaban de los ojos caminando hacia su destino, sin entender qué pudo hacer mal. Llegó a caer en que nada cambió sin mascara... fue lo mismo de siempre... al volver  a casa sentía lo mismo, la tristeza , el vacío y la gran soledad.

Cuando uno está solo porque no tiene a nadie , entonces  el sentimiento de soledad es justificable. Sin embargo, cuando está rodeado de personas y se siente solo... eso es indicación de que no le importas mucho a los que te rodean. Eso va destruyéndote por dentro... no sueles identificar cual es la causa ni el problema. Cuando te esfuerzas por saludar y sonreír, te das cuenta que en el fondo todo sigue igual... porque el sentimiento no ha cambiado. Los demás te sonreirán correspondiendo a tu acción, pero tendrás que seguir haciéndolo siempre, en cuanto dejes de hacerlo, volverás a la invisibilidad.

Yo estuve un tiempo poniéndome esa mascara, porque me di cuenta que los hermanos y hermanas me preguntaban por mi bienestar y salud, pero no con la intención de que yo les contara nada. Enseguida volvían la cara porque no querían escuchar nada. Era un mero formalismo. No todos tenían esa actitud... pero la gran mayoría si. Todos llevan una mascara, te das cuenta después de un tiempo. La sonrisa en la gran mayoría no les sale del corazón, ni la preocupación por uno. El problema de la soledad allí dentro es grave, pero la mayoría no lo confiesa. He conocido a muchos muy solos. Lo peor de todo es que no puedes entenderlo, porque crees que esa es tu familia y que los hermanos se quieren y se preocupan unos de otros. Y piensas que el problema pudiera ser tuyo, pero cuando ya estas cansado de tomar siempre la iniciativa tu, entonces te das cuenta que algo falla ... y eso es el amor. Y es que esa no es tu familia. Tus raíces no están entre ellos, ni siquiera son los que tu escogerías como amigos. Y a pesar de todo , te esfuerzas... inútilmente. Debes salir de allí y quitarte la mascara. Corre hacia gente que te aprecia y te quiere, y que no les hace falta ninguna mascara.
(Es mi opinión y mi experiencia, comprendo que no todos lo vivan de la misma manera.)